Seguro que últimamente has escuchado mucho hablar del SIBO. Se trata de un sobrecrecimiento bacteriano en el intestino delgado. Es decir, una afección que provoca un crecimiento poco usual de bacterias en ese órgano que, como consecuencia, desequilibra la microbiota. Pero, ¿por qué titulamos este post relacionando el aove con el SIBO? Te explicamos.
La alimentación importa
Las causas de la aparición del SIBO pueden ser diversas y, por supuesto, una de ellas está estrechamente ligada con los malos hábitos alimenticios. Por eso, el aceite de oliva virgen extra entra en juego como alimento que contribuye a la reducción de síntomas ya que varios estudios demuestran que el oro líquido, más allá de ser una grasa saludable, tiene propiedades muy beneficiosas para el equilibrio intestinal.
No obstante, como siempre decimos en los artículos de salud, ante cualquier síntoma o molestia, lo mejor es acudir a un profesional.
El aceite de oliva como aliado perfecto contra el SIBO
¿Por qué nuestro zumo de aceituna más preciado puede reducir los síntomas de esta afección?
- Porque contiene polifenoles como el oleocanthal o el hidroxitirosol que tienen propiedades antimicrobianas capaces de reducir el crecimiento de bacterias en el intestino delgado.
- El aove favorece el tránsito intestinal reduciendo el riesgo de estancamiento de bacterias y evitando el sobrecargamiento.
- El oro líquido protege, a su vez, la mucosa intestinal para prevenir la permeabilidad intestinal.
- Porque el aceite de oliva virgen extra ayuda a reducir la inflamación intestinal y el daño oxidativo gracias a su alto contenido en ácidos grasos monoinsaturados y antioxidantes.
Después de desglosar estos cuatro puntos no cabe duda del poder que tiene nuestro preciado aceite para combatir esas molestias que nos produce el SIBO. Todos estos beneficios puedes encontrarlos en el aove tanto en crudo, como cocinado, por lo que…¡No hay excusas! Inclúyelo en todas tus comidas.